El madrileño cuenta a AS cómo gestiona la segunda mitad del curso, frente a la incertidumbre de dónde pilotará en 2023. “No me afectaría quedarme en Pramac”, dice, pero sueña con Ducati.
Parece un proceso natural que a medida que pasa el tiempo en MotoGP, los pilotos vayan generando cierto respeto a las caídas y las lesiones. En el caso de Jorge Martín (Madrid, 24 años), el madrileño ha aprendido a ser más racional tras un revés inesperado que ha condicionado su rendimiento en una temporada donde apuntaba a un top-5 al que no renuncia, aunque ya mira al próximo curso como cuenta a AS. Para 2023 el actual piloto del Pramac espera su mejor versión y un posible cambio de aires que todavía no está confirmado, aunque “seis carreras antes sí lo tenía más claro”. Pero pase lo que pase, pese al interés reconocido de otras marcas, seguirá siendo fiel a Ducati o, dicho de otra manera, al club de sus amores.
-¿Hace un balance positivo de la primera mitad de temporada?
-Sí. Hemos hecho un podio y primeras líneas, segundas líneas en parrilla además de buenos resultados, así que estamos contentos en general. Esperaba un pelín más, pero después de la operación tampoco podía hacer muchísimo. Un sexto, un séptimo y un segundo (en Sachsenring, Assen y Montmeló respectivamente) son buenos de cara a la confianza en esta segunda parte de la temporada. Vienen pistas buenas para mí, siempre en la segunda parte de la temporada suelo ser más competitivo, así que tengo ganas de empezar la verdad.
-Habla de confianza. Después de tantos ceros, la operación y demás, ¿en qué punto se encuentra ahora mismo?
-La verdad que ahora, sobre todo con la moto, es increíble. Pude bajar el récord de la pista en Assen aunque luego Pecco (Bagnaia) lo bajó otra vez, pero cuando puedes hacer esas vueltas tan rápidas la confianza está ahí, sino sería prácticamente imposible. Creo que podemos hacer grandes cosas en lo que viene a partir de ahora, tengo una moto que funciona muy bien, tengo un gran ‘feeling’ y seguramente podamos pelear por las victorias.
-Antes de comenzar la temporada hablaba de un top-5 de manera regular, pero los buenos resultados han tardado más de lo esperado en llegar…
-Al final no hemos acabado carreras y creo que ese ha sido el fallo. Al final acabando todas las carreras en la posición en la que iba cuando caí estaría en el top-4 del Mundial, entonces nuestra posición realista no es donde estamos. Ahora nos estamos recuperando, estamos cerca del cuarto del Mundial y ahora empieza la remontada. Creo que nuestro punto fuerte llega ahora y por unas cosas u otras no hemos podido acabar carreras y principalmente ahí es donde hemos fallado.
-¿Cómo es eso de pilotar sin sensibilidad?
-Es complicado, sobre todo porque entrar a las curvas sin confianza pensando que te vas a caer no se lo deseo a nadie. Al final tienes que pilotar como puedes, un poco por instinto, pero está claro que si pierdes una décima en cada curva pues al final de la vuelta es muchísimo. Ha sido difícil hasta que pude encontrar otra vez en Barcelona esa configuración que me ha ayudado muchísimo para volver a ser competitivo y estar otra vez cerca de los mejores.
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